Joyas, Artes decorativas y objetos de colección
Por Isbilya Subastas
20.12.22
Calle de Virgen de la antigua, nº5 local 41011, Sevilla (España)
La subasta ha concluído

LOTE 769:

SEGUIDOR DE JOSÉ DE RISUEÑO, (Escuela granadina, S. XVIII)
San Cecilio Mártir


Precio inicial:
4 000
Comisión de la casa de subasta: 19%
IVA: 21% IVA sólo en comisión
20.12.22 en Isbilya Subastas
etiquetas:

San Cecilio Mártir
En el campo de la imaginería andaluza, la escultura en barro cocido y policromado llegó a alcanzar una gran relevancia especialmente en Granada a partir del magisterio de Alonso Cano, que solía utilizar este material para hacer sus bocetos, y la especial dedicación a la misma que tuvieron diferentes imagineros, destacando sin duda la figura de José Risueño. Formado como escultor con los Mora y como pintor con Juan de Sevilla, ocupa un lugar de privilegio en la plástica española del final del barroco, surgiendo en torno a su figura multitud de seguidores como el autor de la presente escultura. Su composición cerrada y de evidente esquema piramidal, el modelado minucioso y detallado, el contraste entre las superficies lisas y blandas de las anatomías así como el recurso a una policromía sobria señalan al autor de esta obra como seguidor del maestro.
Realizada en barro cocido, en la composición podemos ver a San Cecilio con túnica blanca mientras dos solados lo llevan al horno excavado en el suelo del monte Illipulitano donde es martirizado. En primer término, a la derecha, podemos como el santo ha sido despojado de la mitra y su capa pluvial, arrojados en el suelo.
La ciudad de Granada vivió a lo largo del siglo XVII y XVIII la recuperación y exaltación de San Cecilio como primer obispo y santo patrono de la ciudad, gracias al descubrimiento de las reliquias que dieron origen a la fundación de la Abadía del Sacromonte. La historia de San Cecilio se remonta a la tradición medieval de los varones apostólicos, que narra cómo Torcuato, Tesifón, Indalecio, Segundo, Eufrasio, Cecilio y Hesiquio habían sido ordenados obispos por San Pedro y San Pablo en Roma, y enviados luego a evangelizar la Bética. Cecilio predicó en Ilíberis, más tarde Envira, a la sazón la antigua Granada. El Códice Emilianense 992 señala a San Cecilio como primer obispo de la diócesis de Granada con motivo de la celebración del Concilio de Elvira (ca. 300-324). El descubrimiento de sus reliquias suponía para Granada no sólo una oportunidad de ratificar su origen cristiano, sino que además, según los hallazgos, situaba a San Cecilio como discípulo directo de Santiago.
Toda Granada, con su arzobispo don Pedro de Castro a la cabeza, comenzó una intensa campaña de credibilidad y profunda devoción hacia este obispo martirizado en la época del emperador romano. No es de extrañar, entonces, que el tema escogido para la realización de esta escultura sea precisamente el martirio del obispo.
39 x 29 x 46 cm